Suena irrespetuoso y provocador, pero es un mantra en castellano! Cuando uno lo comienza a usar, se lo mantra o salmodia (como una alumna me dijo) en voz baja, muy baja, casi susurrándolo. Poco a poco nuestra fuerza vital se potencia, nuestra mente se aclara y nos sentimos plenos, alegres y vivos.
Si bien no es un mantra clásico, de esos que vienen de la India o de Japón, «¿Y qué?» suena a desafío, a decir soy como soy. Y muchas veces lo podemos usar para comunicar a otras personas nuestra decisión sobre un tema. Casi se va a convertir en tu frase preferida.
La dependencia, sobre todo cuando es a la opinión buena o mala de otros, nos quita la energía y nos hace aún más débiles. Hay que buscar desdramatizar esa circunstancia y optar por un remedio que sane, que nos de alivio. En esos casos usamos este mantra.
Hagas lo que hagas, pienses como pienses, nada puede interrumpir esa bella experiencia, porque es tuya, porque la has elegido así, vívela con intensidad, paso a paso, descartando las opiniones de los demás que siempre estarán teñidas de sus propios miedos y atravesadas por sus propias inseguridades.
Sólo por hoy, repite conmigo……»¿y qué?»
Lo mantro a diario! ❤
Un muy buen mantra para todos los días!!!